El 86,7% de los edificios de la ciudad de Barcelona, unos 53.100, se construyeron antes del año 1982, antes de la implementación de las diferentes normativas energéticas y, por tanto, no cumplen con el estándar de aislamiento que fija la ley actual.
La estrategia de la Unión Europea marca que el parque residencial debe reducir las emisiones de efecto invernadero un 55% antes de 2030 y conseguir la neutralidad climática en 2050. Para facilitar la consecución de estos objetivos, la UE pone a disposición de la ciudadanía los fondos Next Generation para fomentar la rehabilitación, adecuación y mejora de viviendas y edificios.
Barcelona quiere formar parte de la vanguardia de la transformación de las ciudades europeas en la lucha contra el cambio climático y uno de los puntos importantes de sus políticas de vivienda es tener un parque sostenible y eficiente energéticamente. Por eso, lanza la campaña ‘Rehabilitar para cuidar con los fondos Next Generation’ para impulsar la rehabilitación de viviendas y edificios para ganar en salud, ahorro y confort.
¿Por qué rehabilitar es cuidar?
Un hogar eficiente es más resiliente contra las olas de calor y de frío, lo que incrementa el confort dentro de casa, mejora el bienestar personal, permite reducir la factura de la luz (en consecuencia, protege contra la pobreza energética) y revaloriza el inmueble.
Pero no solo contribuye a obtener un beneficio individual, sino que también tiene un impacto en tu entorno, puesto que puedes colaborar en la reconstrucción de una ciudad más verde y ecológica, y dinamizar la economía local (con la contratación de profesionales del sector).
¿Por qué es ahora el momento?
Porque la Unión Europea ofrece una oportunidad única gracias a unas ayudas que nunca se habían ofrecido y que cuentan con unas condiciones muy ventajosas:
- Pueden cubrir hasta el 80% de tu proyecto de rehabilitación.
- Existen incentivos de subvención del 100% de la rehabilitación para personas que acrediten vulnerabilidad social.
Estos fondos se dirigen a vecinos y vecinas propietarias de una vivienda en Barcelona, personas usufructuarias y propiedades verticales físicas o jurídicas.
Las cuatro líneas de ayudas
- En el ámbito particular, puedes solicitar la ayuda para realizar trabajos de rehabilitación en tu domicilio habitual. Si eres propietario de una vivienda, esta línea de subvención te ofrece ayuda económica para ejecutar medidas de eficiencia energética como la modificación de cierres, el cambio de ventanas o el cambio de sistemas de climatización para sustituir energías fósiles por energías renovables o biomasa.
- También puedes convencer a la comunidad de vecinos y vecinas para actuar en elementos comunes del edificio (sea plurifamiliar o unifamiliar, primera o segunda residencia, o vacíos) que permitan mejorar la eficiencia y el ahorro energético. En este caso, será necesario acreditar la reducción del consumo de energía primaria no renovable y de la demanda energética.
- El Libro del Edificio y Proyectos es un estudio técnico que contiene las características del edificio, así como instrucciones de uso y mantenimiento para alargar la vida útil y evitar la degradación. La ayuda cubre parte de los gastos de honorarios y la realización de proyectos de rehabilitación integral de edificios.
- Por último, existen unas ayudas para la rehabilitación de barrios, destinadas a rehabilitar edificios de viviendas con criterios de eficiencia energética. Estas subvenciones forman parte de un plan de intervención institucional en barrios vulnerables de la ciudad.