El emblemático edificio de Sarrià - Sant Gervasi acogerá 37 alojamientos para personas mayores y jóvenes y equipamientos de barrio y estará protegido arquitectónicamente.
El antiguo Hotel Buenos Aires será de titularidad pública y acogerá alojamientos dotacionales y equipamientos. El Plenario del Consejo Municipal ha aprobado provisionalmente este viernes una Modificación de Plan General Metropolitano (MPGM) que permitirá al Ayuntamiento adquirir este edificio emblemático de Sarrià – Sant Gervasi, cambiarle la calificación urbanística para hacer alojamientos asequibles para gente mayor y jóvenes y equipamientos de barrio, y catalogarlo para proteger su singularidad arquitectónica. El plan ha sido aprobado con los votos a favor del Gobierno municipal y ERC y la abstención de Junts per Catalunya, por lo que ha superado el último trámite municipal y ahora encarará la aprobación definitiva en la Subcomisión de Urbanismo de Barcelona.
Doble objetivo
La propuesta tiene un objetivo doble. Por un lado, dar respuesta a la reivindicación vecinal de preservar la memoria y el valor histórico del inmueble, situado en la calle Mont d’Orsà, 31-33, en la parte alta de Vallvidrera. En los últimos tiempos se han levantado voces de los vecinos y vecinas y de entidades que alertaban del peligro que se desarrollara un proyecto privado que acabara provocando la pérdida de un edificio considerado icónico para el barrio y para la ciudad y que, además, ya ha sido utilizado por el vecindario para realizar actividades comunitarias. Recogiendo esta preocupación ciudadana y tras encargar un estudio histórico para valorar la importancia patrimonial del antiguo hotel, el Ayuntamiento ha decidido catalogarlo para conservar su valor y esencia.
El segundo propósito es destinarlo a alojamientos dotacionales, especialmente orientados hacia los ancianos y los jóvenes. La naturaleza del edificio, originariamente un hotel, es óptima para acoger estos usos dotacionales. Además, se ubica en un ámbito muy escaso de vivienda pública de alquiler. En todo el distrito hay ahora mismo sólo 209 viviendas de alquiler por debajo del precio de mercado, un 0,37% de las 57.009 viviendas que hay en total. Las cifras quedan muy lejos del 15% de viviendas destinadas a políticas sociales que marca la Ley 18/2007 del derecho a la vivienda. Por lo tanto, esta será una acción destacada en materia de alojamientos en el barrio de Vallvidrera, el Tibidabo i les Planes.
La MPGM afecta a una superficie total de 3.922,44 m2. Prevé mantener íntegramente el edificio existente, que tiene una planta baja y tres plantas piso y unos 1.897 m2 de techo, y proyecta construir un nuevo edificio de unos 1.045 m2 de techo. En total, se harán 37 alojamientos dotacionales, de los cuales unos 17 irán en el antiguo hotel y serán para la tercera edad, y unos 20 en la edificación nueva y para jóvenes.
Además, se destinarán preferiblemente a equipamiento de barrio la planta baja, para aprovechar su contacto inmediato con la calle y el espacio libre de la parcela, y el antiguo comedor de la primera planta. Los usos que tendrán se consensuarán con el vecindario y las entidades del entorno.
El nuevo planeamiento contempla, a partir de la aprobación definitiva, iniciar el proceso que permitirá obtener en los próximos años la titularidad pública del suelo destinado a equipamiento, y estima su valor de expropiación en unos 3,5 millones de euros.
Un icono de principios de siglo XX
El antiguo Hotel Buenos Aires fue uno de los varios hoteles que se construyeron a principios del siglo XX en la parte alta de Vallvidrera, aprovechando la ubicación privilegiada de este entorno de la ciudad. Fue proyectado en 1885 como fonda, y adquirió su imagen actual entre 1908 y 1909 con una reforma y ampliación del arquitecto Jeroni Granell, quien lo transformó en un gran hotel. El estilo se sitúa en la última etapa del modernismo barcelonés.
Se trata de un edificio de planta baja, tres plantas piso y sótano a cuatro vientos construido con obra de ladrillo revestida. El antiguo comedor, en la primera planta, es el espacio más importante de todo el conjunto. Es la estancia más amplia y luminosa y tiene siete balcones grandes. Preserva de manera casi intacta sus acabados originales, con cerámica vidriada en techos y arrimaderos, y vitrales de colores en el coronamiento de los balcones. También tiene pavimentos de mosaico hidráulico ornamental en el suelo y lámparas de hierro forjado y vidrio de colores.
La ficha del catálogo que se ha trabajado para incluir en el MPGM establece el mantenimiento de la volumetría del proyecto de Jeroni Granell, y le otorga un nivel C de protección. El comedor, los espacios nobles tales como la escalera principal y los elementos de decoración original de la planta noble se deberán conservar y restaurar. Las fachadas y elementos que formen parte de ella -balcones, barandillas, etc.- deberán mantener su esencia original, y los colores que haya que adoptar para las superficies y elementos de fachada se escogerán a partir de una interpretación histórica, arquitectónica y paisajística y la diagnosis del estado constructivo del inmueble.