El proyecto de vivienda pública de alquiler asequible para jóvenes y el espacio para la Colla Castellera Joven de Barcelona Can Fabra ha sido seleccionado como finalista de la convocatoria ‘Panorama de Obras de Arquitectura y Urbanismo’, en la Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo.
El proyecto, promovido por el Instituto Municipal de la Vivienda y Rehabilitación de Barcelona y construido en las naves industrial del recinto de Fabra i Coats, en el barrio de Sant Andreu del Palomar, ha sido uno de los 70 proyectos elegidos para pasar a la última ronda, que premiará 20 como el más relevante de la arquitectura y el urbanismo español de los últimos años. De este proyecto del despacho Roldán Berengué Arquitectos destaca la rehabilitación y la conservación del patrimonio industrial para reutilizar sus cualidades físicas, espaciales e históricas y reforzar la naturaleza del edificio original. También se ha puesto en valor la promoción de la vivienda social y el alquiler asequible en la ciudad. En este sentido, se ha destacado la aportación en el barrio de más de 28.000 m2 en equipamientos y vivienda social.
Uno de los otros proyectos que también forma parte de los 70 finalistas es La Borda, un proyecto de recuperación de Can Batlló, un antiguo recinto industrial de finales del siglo XIX situado en el distrito de Sants-Montjuic, en un solar cedido por el Ayuntamiento de Barcelona por 75 años. Este proyecto, en el que participó la cooperativa de arquitectos Lacol, se convirtió en el primer edificio de obra nueva de covivienda en la ciudad de Barcelona.
La Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo se celebrará por primera vez en una doble sede de forma paralela: del 28 de junio al 16 de septiembre, en el Pabellón Mies van der Rohe, en Barcelona, y del 2 de julio al 10 de octubre al Patio Herreniano del Museo de Arte Contemporáneo Español, en Valladolid. Bajo el lema «España vacía, España llena. Estrategias de conciliación”, la edición de este año propone una aproximación a la realidad territorial diversa con la voluntad de trazar similitudes y diferencias que permitan definir puntos de encuentro en cuanto a territorio, sociedad, sostenibilidad, género, demografía, colectividad y economía. La realidad social y el acceso a la vivienda son, pues, temas clave en esta bienal. Y es que tal y como apunta el jurado, las obras seleccionadas «responden a los retos de la sociedad, que se vinculan y arraigan con los lugares donde se asientan y que aportan soluciones para mejorar el contexto social y cultural en que operan».